Para sumar al fortalecimiento y mejoramiento del Sistema Penitenciario de Baja California, mediante el acceso al trabajo de la población femenil, se inauguró la Primera Industria Textil Femenil en el Centro Penitenciario de Tijuana, de la mano con la empresa textil “Poli Diseños, Cosiendo Ideas”, radicada en Tecate, que ofrecerá trabajo remunerado a 10 mujeres privadas de la libertad en la primera fase del proyecto, con lo que se pretende dignificar su proceso de reinserción social.
La titular del Sistema Penitenciario, Ma. Elena Andrade Ramírez, calificó como un hecho histórico la apertura de esta industria al interior del Centro Penitenciario de Tijuana, considerada dentro de una gama de varios proyectos a través de los cuales se trabaja para impulsar la transformación del Sistema Penitenciario, mediante la fusión de los ejes fundamentales del proyecto reinsertor con la participación de entidades y organismos de la sociedad civil.
“Con la puesta en marcha de un pequeño espacio para realizar los trabajos de maquila, se tuvo que recorrer un largo camino que representó un gran reto con el propósito de dar atención digna a las y los privados de la libertad tal y como lo establece la normatividad vigente, y en base a los lineamientos del gobierno estatal para beneficio de la población penitenciaria”, dijo.
Resaltó que, desde que asumió el liderazgo en la CESISPE se dio a la tarea de atender todas recomendaciones de Derechos Humanos, tanto nacional como estatal, en el área de la salud, reubicación de privados de la libertad a otros centros penitenciarios del Estado y federales, así como la falta de gobernabilidad y, tras atender estos temas, se enfocó en la necesidad de que toda la población generara una autopercepción de utilidad a través de la capacitación para el trabajo.
En este proceso se contó con la intervención solidaria del Centro de Capacitación para el Trabajo Industrial 191 (CECATI), al que se fueron sumando la Secretaría del Trabajo como aval moral para que las personas que terminan su sentencia puedan acceder a trabajos dignos en diferentes empresas que han manifestado su interés por contratarlas.
Reconoció la comisionada que, tras haber realizado un traslado de más de cuatro mil personas privadas de la libertad del Centro Penitenciario Tijuana, se buscó un “rinconcito de esperanza” y personas que creyeran en el proyecto de la Industria Textil; fue a través de “Poli Diseños, Cosiendo Ideas”, que representa Araceli Molina Cortes, que se habilitó ese espacio donde se confeccionarán, además de ropa y uniformes, “sueños y esperanzas” en cada una de las 10 internas que laborarán, pues su desempeño será remunerado y gozarán de las prestaciones a que tienen derecho todos los trabajadores de cualquier empresa.
Durante el acto se contó con la presencia de del secretario del Trabajo, Alejandro Arregui Ibarra; así como de la presidenta de la Comisión de Seguridad Pública y Protección Civil del Congreso del Estado, diputada Rosa Margarita García Zamarripa; la consejera nacional de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo de México (CONCANACO); el primer visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de la entidad, Heriberto García García; y la representante de la empresa “Poli Diseños, Cosiendo Ideas”, Araceli Molina Cortes.
A través de breves discursos reconocieron el esfuerzo e interés de la comisionada por generar un sólido cambio al interior del Sistema Penitenciario, pero más allá, por la transformación de las personas internas, brindándoles la oportunidad de que en base a lo aprendido a través de la capacitación laboral se desarrollen en este ámbito en su estatus actual, así como en el futuro, toda vez que logren su reincorporación a la sociedad.
Por su parte, y para concluir, la representante de “Poli Diseños, Cosiendo Ideas” agradeció a la comisionada Andrade Ramírez la instalación del taller, ya que se trata de un proyecto para empoderar a las mujeres que hoy se encuentran en una situación vulnerable, a través de un trabajo que brindará productos y servicios de calidad, respaldados por 12 años de desarrollarse en la industria textil, y que deja puertas abiertas para que al concluir las mujeres su estancia al interior del Centro Penitenciario sean parte de la fuerza laboral de su empresa.