Hace algunos años atrás, un 3 de febrero de 2018 para ser exactos, 70 familias de la colonia Lomas del Rubí se quedaron sin hogar luego de que se diera un deslizamiento resultado de los movimientos de tierra realizados por un fraccionador que construía un nuevo fraccionamiento cercano al lugar.

Desde ese día, los afectados desconocían todo lo que tendrían que enfrentar meses después, la burocracia gubernamental sería el más complicado de todos para acceder a alguno de los distintos beneficios que en su momento fueron anunciados por las autoridades en turno, en aquel entonces el Alcalde era el panista Juan Manuel Gastélum y el también panista Gobernador de Baja California, Francisco Vega de Lamadrid.

El descontento por las idas y vueltas sin fin al cual fueron sometidos los afectados de Lomas del Rubí subió de tono cuando los morenistas abrazaron la causa y aumentó de inmediato el descontento de la gente hacia los gobiernos panistas por lo que ellos consideraban era muy lento y poco el recurso o las soluciones que en las mesas de trabajo se les proponían.

Entre esas ofertas estaban terrenos que en su momento rechazaron los afectados de El Rubí, pero varios de ellos recibieron apoyos económicos para cubrir rentas y el Gobierno morenista que se aproximaba a rendir protesta adelantó que estaban buscando la forma de entregarles casas adjudicadas de INFONAVIT, de estas últimas algunos aceptaron pero no contaban que tenían adeudos impagables para poderlas regularizar.

Más tarde se supo que cerca de Verona Residencial, estaría el Gobierno construyendo un nuevo fraccionamiento para los afectados de Lomas del Rubí, pero el reclamo para el exgobernador Jaime Bonilla y el exalcalde Arturo González fue fuerte porque se acusó en su momento que muchos afectados estarían quedando fuera de ese beneficio e incluso personas que no acreditaron el buen inmueble perdido con el derrumbe estarían teniendo casa nueva.

Hasta el día de hoy, el problema legal y social que enfrentan los afectados de Lomas del Rubí sigue sin solución y para el gobierno morenista en turno les resulta práctico patear el bote y culpar a las administraciones pasadas de todo, mientras los deslizamientos continuaron hasta llegar a afectar a más de 200 viviendas.

Ahora la situación se repite pero en Camino Verde, donde el pasado 28 de febrero de 2022 comenzaron una serie de deslizamientos de tierra, provocando con eso la afectación de más de 277 viviendas y al menos unos mil damnificados.

De nueva cuenta, los afectados de Camino Verde están repitiendo la amarga historia por la cual ya pasaron los de Lomas del Rubí, las autoridades municipales y estatales pero ahora de los Gobiernos emanados de Morena, prometen mucho pero cumplen poco, según han reclamado los vecinos que han perdido sus respectivos patrimonios.

En su visita a Camino Verde hace unos días, la Gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda recorrió la zona afectada y ahí fue abordada por un grupo de afectados a quienes dijo que ya se está terminando el censo para conocer la cifra exacta de los damnificados y que contarían con apoyos como dinero en efectivo para el pago de rentas.

En esa visita, la Gobernadora fue muy clara al decir que la zona ya es inhabitable y se tendrá que evaluar la reubicación de las familias afectadas por los deslizamientos.

Los vecinos comienzan a desesperarse y culpan directamente a la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT) por las fugas de las tuberías que reemblandecieron el suelo para posteriormente darse los deslizamientos.

Ya se han manifestado familias enteras porque alegan que para recibir alguno de los apoyos prometidos, se están enfrentando a papeleos y más papeleos burocráticos.

Y es que no es para menos estimado lector, para que un peso salga de las arcas gubernamentales, se tiene que comprobar que quien asegure ser propietario de una de las casas derrumbadas, pues realmente cuente con los documentos que acrediten lo dicho, caso contrario será igual a Lomas del Rubí.

En Lomas del Rubí se encontró que muchos de los afectados rentaban y no eran los propietarios, varios de los dueños de las casas viven en Estados Unidos y reclamaron la reubicación de sus viviendas, predio o recurso económico, pero lo mismo hicieron quienes rentaban, lo cual ocasionó duplicidad de apoyos y con eso postergar las respectivas entregas.

Ojalá que los vecinos de Camino Verde realmente estén muy bien organizados porque el tiempo avanza y las autoridades municipales y estatales parecen seguir haciendo lo que mejor saben hacer, patear el bote y ganar más tiempo, antes que entrarle al toro por los cuernos y ofrecer soluciones pronto. Nos mantendremos atentos a esta situación, nos leemos pronto, escríbeme a estrada.maldonado.ismael@gmail.com

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