Podemos decir que Trasatlántico es una serie interactiva. Es una gran historia apasionante y divertida, ligera pero profunda. Se siente como si fuera una comedia de situación, pero realmente es un drama histórico con tintes de comedia y conspiración basado en hechos reales enmarcados en la Segunda Guerra Mundial. Es vital tener a la mano un buscador como Google para buscar a los personajes que van a rescatar y dimensionar la importancia de cada artista rescatado, y así aumentar la tensión y ser parte de este equipo de refugiados.
Mary Jayne Gold y Albert Hirschman, interpretados pro Gillian Jacobs y Lucas Englander, son dos soñadores revolucionarios que luchan contra el régimen nazi en Marsella y buscarán rescatar a los artistas y pensadores refugiados y acosados en Francia en 1940. Con la ayuda del diplomático norteamericano Varian Fry, interpretado por Cory Michael Smith, y el botones Paul Kandjo, interpretado por Ralph Amoussou, buscarán la forma de burlar a los opresores amigos y los enemigos, como el embajador norteamericano Graham Patterson, interpretado por Corey Stioll, y al comandante Philippe Frot, interpretado por Gregory Montel, para cruzar las fronteras y poner a salvo a los artistas por cielo, mar o tierra y así llevarlos a Inglaterra, España o México.
Al estar inspirada en hechos reales, es emocionante ver cómo pudo haber sido el trabajo por rescatar a los artistas y grandes pensadores de la época que eran perseguidos por los nazis. Nuestra aventura empieza con el intento de rescate del filósofo Walter Benjamin, interpretado por Moritz Bleibtreu, pasando por los casos de Walter Mehring, interpretado por Jonas Nay; el pintor Marc Chagall, interpretado por Gera Sandler; y del escritor André Breton, interpretado por Lois-Do de Lencquesaing, así como los casos de Hannah Arendt, Max Ernst y Marcel Duchamp. Insisto, que buscar en Google a cada personaje mientras ves cada episodio mejora la experiencia, la hace interactiva.
La producción francoalemana es dirigida por las suizas: Stéphanie Chuat y Véronique Reymond, así como la alemana Mia Maariel Meyer y se nota el trabajo en equipo. Son notables los valores de producción en las escenografías, el vestuario, las locaciones, las coreografías y hasta las escenas de acción. La sensación es como una serie de comedia, con colores vivos y estéticos paisajes.
La historia es verosímil, la cohesión entre los personajes nos sumerge y nos hace cómplices del operativo al margen de la legalidad en el guion trazado por Tundle Aladese, Daniel Hendler, Julie Orringer, Ana Winger, Steve Bailie, Carey McKenzie e Isabel Teitler, quienes le dan sustento histórico a la trama y diálogos deliciosos y enriquecedores que soportan la bien actuada, editada y desarrollada historia.
Los siete episodios de 40 minutos se pasan rápido en esta propuesta británica en la plataforma de Netflix que concentra grandes talentos de diferentes nacionalidades que convergen en un proyecto que habla de la migración.