Tocar la Campana de la Victoria representa poner punto final a una etapa ya superada, y dar inicio a una nueva, tal como lo hizo Alejandra Guillén López, que finalizó su tratamiento contra el cáncer en UNEME de Oncología en Mexicali.

Alejandra  de 45 años, presentaba un cáncer de ovario etapa 1c y fue intervenida a una cirugía en el Hospital Materno Infantil, para luego ser referida a la UNEME de Oncología, donde recibió quimioterapia, ya finalizó su tratamiento e inició el periodo de vigilancia de 5 años.

Alejandra Guillén no presentó ningún síntoma de dolor, pero su vientre comenzó a crecer de una manera muy rápida, fue por ello que acudió a revisión. Ella estaba consciente que contaba con el antecedente familiar de cáncer, ya que su papá, mamá y hermana lo habían padecido.

La familia Guillén siempre se apoyó de todo el personal de la unidad. Sus amigos la acompañaron durante su tratamiento y la animaban a seguir adelante “Después de la quimioterapia, hay vida”, siempre le insistieron.

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 Sonar la campana de la victoria reduce la ansiedad que conlleva el tratamiento, es una nueva forma de compartir la felicidad y alegría de quien ha finalizado una dura batalla y así transmitir esperanza al resto de los pacientes.

Desde el año 2013, en la UNEME de Oncología se han atendido 17 mil 616 personas. En lo que va del año se ha brindado atención a alrededor de 2 mil pacientes con servicios como braquiterapia, quimioterapia, radioterapia, consultas de displasias, medicina interna, oncología, radioncología, clínica del dolor y psicología.

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