Ismael Estrada MaldonadoJubilación, pensión y el pago de las viudas para policías del sistema penitenciario ahoga al Gobierno de Baja California y ante la cada vez más próxima salida de la administración del Gobernador Jaime Bonilla Valdez, el problema parece que continuará para la entrante Gobernadora Marina del Pilar.
Ustedes estimados lectores atestiguan cómo administraciones se van, otras llegan y el círculo de falsas promesas continúa para los oficiales de la policía y también para los custodios penitenciarios que luchan todos los días para que sus derechos laborales se respeten, no piden más que lo que merecen, a diferencia de otros empleos en la ciudad, aquí se arriesga la vida.
Justo así es como sucede con el gobernador de Baja California, Jaime Bonilla Valdés, quien recientemente fue señalado por incumplir promesas a custodios penitenciarios y a oficiales de la policía municipal en Tijuana.
A decir de los manifestantes, alrededor de 100 personas se encuentran a la espera de que suceda su jubilación, 54 de ellos considerados de muy urgentes, entre custodios en muy mal estados de salud, años de servicio, por edad, mujeres con cáncer, hombres con amputaciones, enfermedad mental y viudas.
Si bien expresan los inconformes, agradecen al Gobernador Jaime Bonilla por el aumento salarial que se contempla en la recién aprobada Ley de Seguridad de Baja California, no es suficiente para atender las necesidades de este sector de la población.
El lunes 11 de octubre, el propio Presidente de la Asociación de Policías de Tijuana, Noé Ramírez Ibarra, declaró ante medios locales que atendieron el llamado de la manifestación realizada en el Centro de Gobierno del Estado, que lamentaba que los beneficios de seguridad social tan cacareados por Jaime Bonilla sólo quedaron en falsas promesas.
Y es que hasta la fecha, la administración estatal que está próxima a concluir su encomienda, no ha liberado los 400 millones de pesos que en su momento aprobó el Congreso del Baja California para que los beneficios contemplados en la Ley de Seguridad que fue publicado en el Periódico Oficial del Estado el 28 de diciembre de 2020, se apliquen correctamente.
Noé Ramírez fue más allá, subrayó que nunca antes se habían involucrado con políticos, salvo esta ocasión en que el propio Jaime Bonilla los convocó en campaña para respaldar su propuesta de impulsar mejores salarios y condiciones de trabajo para custodios penitenciarios y policías.
Pero el Oficial Cuauhtémoc Pérez Regalado, Presidente de la Asociación de Oficiales Penitenciarios, fue más allá sobre el tema durante la manifestación, al señalar que a Marina del Pilar se le pedirá tan pronto asuma el cargo de Gobernadora, que se cubran los mil elementos de
Custodia penitenciaria que hacen falta en Baja California.
Difícil panorama sin duda para la Gobernadora entrante cumplir con esta demanda por la poca o nula convocatoria que han tenido los intentos de las autoridades por reclutar más policías no solo para Tijuana, sino también para el resto de los municipios.
Triste es saber que la Ley de Seguridad del Estado de Baja California incompleta está para dignificar el trabajo policial, pero más triste todavía es que el presupuesto público que debe acompañarle prácticamente no existe y muy difícil que pronto se logre completar, tomando en cuenta que se avisora poco o nulo presupuesto federal para atender el tema de seguridad en la entidad. A medida que el tiempo pase lo iremos viendo en el camino. Escríbeme a estrada.maldonado.ismael@gmail.com ¡Nos leemos muy pronto!