Un año y medio de prisión podría ser el castigo contra Ashley, la joven que al conducir en estado de ebriedad le quitó la vida a 3 personas sobre la vía rápida poniente de Tijuana. Y es que el homicidio culposo no está tipificado como grave por lo que la justicia mexicana podría dejarla en libertad pagando una garantía que aún se evalúa.

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Ashley es ciudadana americana, nació en el 92 y vive en Tijuana. Podría salir libre porque para el código civil no es un delito grave y no requiere de prisión preventiva oficiosa pero la Procuraduría de Justicia Estatal buscará la prisión justificada. Legalmente, Ashley podría enfrentar el juicio en libertad pero se debe garantizar que no evada la justicia y si repare el daño. Las autoridades tienen temor a la sustracción a la justicia.

“Sí resultó positivo de alcohol en la sangre. No traemos el reporte de la velocidad pero el carril por el que se incorporó es el de entrada no salida y es cuando perdió el control”, explicó  Jorge Alberto Álvarez Mendoza, subprocurador de zona en Tijuana.

Será un juez que fije el monto de la garantía para que Ashley pueda enfrentar el juicio en libertad y sopesar si ella no escapará pues ya hubo un intento de que huyera de la escena del crimen.

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“Tenemos varias versiones de lo ocurrido después del accidente y sabemos que hay bastantes testigos de los hechos. No sabemos si alguien quiso ir por ella y llevársela del lugar de los hechos o ella quiso huir y subirse a un auto”, explicó el subprocurador Álvarez Mendoza.

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