El sábado 25 de marzo de 2023, el expresidente Trump realizó un mitin en Waco, Texas para “atacar” a los fiscales que lo investigan, empleando un lenguaje conspirativo para encender y mantenerse con sus simpatizantes como el favorito para la nominación  republicana lal cual  prevé tendrá muchos contendientes. Es importante mencionar que Waco fue el escenario de una tragedia hace 30 años de la que algunos grupos extremistas aún responsabilizan al Estado.

Con sus acostumbradas declaraciones falsas, de la guerra en Afganistán , el muro fronterizo con México que no terminó y una posible orden de aprehensión en su contra,  el ex mandatario se refirió a las elecciones de 2024 como “la batalla final”. 

Algo que llamó la atención, fue la poca fuerza que tuvieron sus llamados en las últimas semanas, ya que se cree que la investigación del fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, sobre el papel de Trump en un presunto esquema de pago de dinero secreto a la estrella de cine para adultos Stormy Daniels se acerca a su etapa final. 

Trump, en su red social Truth Social, predijo su propio arresto y advirtió que conduciría a “potencial muerte y destrucción” y que “podría ser catastrófico para nuestro país”. Situación distinta pasó en enero del 2021, cuando sucedió el ataque al capitolio y vimos su poder de convocatoria. Sin duda, Trump ha perdido fuerza y vigencia.

Frente a una posible causa penal en su contra, Donald Trump adoptó el sábado una postura desafiante ante su partidarios en Waco, donde habló con desprecio de los fiscales que lo investigan y reiteró sus reivindicaciones en una ciudad que se hizo famosa por un episodio de resistencia mortal frente a las fuerzas de la ley.

Los críticos de Trump vieron el primer mitin como un acercamiento a los partidarios de extrema derecha del expresidente que busca reelegirse. Un cúmulo de recientes encuestas publicadas en el portal “Real Clear Politics”, arroja un empate técnico entre el Presidente Joe Biden y el Ex Presidente Donald Trump. 

La reunión de Trump en terrenos del aeropuerto en Waco muestra los esfuerzos del expresidente para aprovechar la posible causa penal en su contra como grito de guerra, donde sostiene se mantendrá de pie siendo el favorito a la candidatura.

Ante el discurso más extremista y polarizante que se la ha escuchado al expresidente, Trump parece estar más perdido que Texas.

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