Salvo el sorpresivo abrazo que en pleno evento público pidió AMLO que se dieran a Alcaldesa de Tijuana, Monserrat Caballero Ramírez y la Gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, para apaciguar las aguas, no hubo nada nuevo en la pasada visita del Ejecutivo Federal a esta ciudad fronteriza, al menos no que se ventilara a todos los vientos.
Pero dicen los que saben de este tipo de giras presidenciales, que tanta fue la alineación de los astros que el Presidente de México vino a hacer a esta tierra de migrantes, que el rostro de la primera edil tijuanense reflejaba todo menos felicidad.
Y es que no es para menos estimado lector, para todos los sectores de la población es más que evidente la relación trunca que existe entre las mandatarias de Tijuana y Baja California.
Primero vino el rechazo de Monserrat a la creación de la Secretaría de Seguridad porque traería de regreso a la Policía Estatal Preventiva, de la cual según la Alcaldesa los tijuanenses tienen muy mala imagen, aunque su actual Director de Policía y Tránsito Municipal venga precisamente de las directrices de esa cuna policial.
En respuesta, la Presidenta Municipal recibió una “Papa caliente” con la propuesta de la Diputada Local Araceli Geraldo de dividir en dos al municipio de Tijuana para crear la Nueva Tijuana en la
Zona Este, el sector más poblado y con mayores rezagos sociales, pero también donde actualmente se centra el poderío electoral de Morena.
Y si a esto le sumamos la ruptura entre los 10 Regidores y la Alcaldesa por su intentona de querer cambiar de recinto de Cabildo de Palacio Municipal a la Zona Este, pues vaya que le ha llovido sobre mojado a Monserrat Caballero.
Para muchos es claro que la estrategia de seguridad que se sigue en Tijuana no está funcionando en tan poco tiempo de iniciado el presente gobierno municipal, toda vez que los asesinatos siguen a la alza, y en este sentido algo en lo que AMLO tiene razón y mucha, es que coordinados, conciliados los tres órdenes de Gobierno sí se podrá avanzar en el tema que nos ocupa y preocupa a todos: la seguridad pública.
Estaremos viendo más despliegue de las fuerzas armadas, sobre todo mayor presencia de la Guardia Nacional, mientras la Gobernadora Marina del Pilar renace la Secretaría de Seguridad, por lo que lo
Menos que a la Presidenta Municipal de Tijuana le queda es ajustar su estrategia operativa policial y corregir pronto el descontento generalizado que hay entre su ejército de policías, quienes reclaman dignificación de su trabajo con mayores prestaciones, cobertura de las jubilaciones y pagos a las viudas de los agentes caídos en cumplimiento de su deber.
Si realmente el abrazo entre Monserrat y Marina no fue frío, entonces es cuestión de días en que las veamos juntas en las mesas de coordinación de seguridad discutiendo las correcciones a la estrategia de combate a la delincuencia que debe seguirse en cada una de las colonias de Tijuana.
Ya AMLO le dio una bocanada de oxígeno a la Munícipe al anunciarle que recibirá todo el apoyo de su Gobierno para resolver el conflicto con los Migrantes asentados en la garita de El Chaparral, por lo que su ocupación en estos momentos deberá estar enfocada a la coordinación efectiva y aquí estimado lector, no hay de otra, el orgullo habrá que hacerlo a un lado y sonreír mientras la tormenta pasa a mejores mares.
Qué bien se vería el anuncio de una cruzada ciudadana por la seguridad encabezada por la Presidenta Municipal de Tijuana, respaldada por todos los sectores de la población que están dispuestos a trabajar de inmediato en reforzar lo que se tenga que ajustar para recuperar la paz y la tranquilidad de esta ciudad fronteriza.
Experiencia en esta cruzada la hay en Tijuana y mucha, porque para muchos no nos es ajeno el que hace más de una década se dio la muestra al mundo entero de lo que los tijuanenses son capaces de hacer cuando de proteger a nuestras familias se trata. Estaremos muy atentos a los cambios que pudieran venir para Tijuana en las próximas semanas en esta materia. Escríbeme a estrada.maldonado.ismael@gmail.com ¡Nos leemos pronto!